Exalumnos Destacados: Caroline, Cohorte 28

Caroline es exalumna de High Jump y estudiante de tercer año en Latin School, que es donde asistieron sus propios asistentes de enseñanza (TA) cuando Caroline estaba inscrita en High Jump. “Mis TA estudiaron latín y los admiraba mucho”, dice ella. “¡Supongo que terminé siguiendo sus pasos!”

El verano pasado, Caroline comenzó a trabajar como asistente técnica en el campus de Lab School, y fue una experiencia muy diferente de lo que ella (¡y todos los demás!) esperaban. “Todo era virtual. Al principio fue estresante, pero High Jump hizo posible mantener el tipo de conexiones que eran tan importantes para mí como estudiante. Los otros TA fueron muy acogedores y hemos hecho mucho para vincularnos entre nosotros. Realmente me divierto mucho, lo cual es un poco extraño porque ¡solo estoy sentado frente a una computadora! Pero conocer a los niños y permitirles entender mi experiencia en latín y mi forma de aprender ha sido muy gratificante, aunque no estemos en la misma habitación”, dice.

“Este verano, adaptamos algunas de nuestras sesiones de tutoría opcionales diarias para que sean más una hora social. Ahora nos tomamos el tiempo para jugar, hablar sobre nuestras preocupaciones, incluso hacer una fiesta de baile. Hizo que los estudiantes se sintieran muy felices de tener ese tiempo con sus amigos y también con sus TA”.

Caroline trabaja en estrecha colaboración con los maestros de High Jump para garantizar que los estudiantes se mantengan lo más comprometidos, concentrados y felices posible mientras aprenden de forma remota. “Algo que ha funcionado muy bien este año es la creación de salas Zoom para grupos pequeños para que trabajen los niños. El maestro y yo entramos cada pocos minutos para responder preguntas y verificar el progreso; el resto del tiempo, los niños tienen la oportunidad de conocerse y colaborar. ¡Es mucho mejor que simplemente tener un maestro que les hable!”

Este tipo de colaboración es crucial, dice Caroline, porque lo mejor de High Jump es la comunidad, y hay más en eso que solo lo académico. Caroline y sus compañeros TA descubrieron que los niños podrían beneficiarse de más recreación durante el día. “Este verano, adaptamos algunas de nuestras sesiones de tutoría opcionales diarias para que sean más una hora social. Ahora nos tomamos el tiempo para jugar, hablar sobre nuestras preocupaciones, incluso hacer una fiesta de baile. Hizo que los estudiantes se sintieran muy felices de tener ese tiempo con sus amigos y también con sus TA”, dice ella.

La experiencia de Caroline como TA de High Jump la preparó bien para un año escolar remoto. Luego, a finales de octubre, la Escuela Latina hizo la transición a un modelo híbrido remoto/presencial. “Estoy un poco nerviosa, pero también emocionada de comenzar a aprender de una manera diferente”, dice. Ella también está ansiosa por comenzar a planificar su futuro; Caroline es la primera en su familia en tener la ambición y la oportunidad de ir a la universidad. “En este momento, estoy empezando a considerar las escuelas. Me gustaría estudiar medicina, así que estoy considerando la Universidad de Michigan y la Universidad de Pensilvania. Pero aún es temprano, tengo mucho en qué pensar”.

Caroline sabe por experiencia que los niños de High Jump admiran a sus TA y recurren a ellos en busca de consejos y orientación. A los estudiantes de secundaria con los que trabaja, Caroline les ofrece estas sabias palabras: “Les daré el mismo consejo que me doy a mí misma: sigan adelante. Lo que estamos pasando en este momento no se siente bien, pero tenemos muchos años por delante y todo esto valdrá la pena a largo plazo. Todos estamos pasando por esto ahora juntos, y lo superaremos juntos también”.